Bienal de Ljubljana, Slovenia
Por ROSA FACCARO
Miembro de la Asociación
de Críticos de Arte
Los trabajos del envío argentino, obedecen a un criterio de selección dirigido a la «joven generación» de grabadores. Está involucrada en esta representación, la experiencia adquirida por estos jóvenes con los maestros de la generación de los 60 y de los 80, quienes formaron con sus enseñanzas a estos artistas… Se le otorga así, la oportunidad a aquellos jóvenes gráficos, que trabajan con continuidad en la construcción de un espíritu de indagación, hacia los problemas estéticos, artísticos, y sociales.
Estos artistas han demostrado una obra madura y consecuente, tendiendo a explicitar en las imágenes, la conceptualización de nuestra cultura en los tiempos actuales.
El grabado en la Argentina ocupa un sitial importante en el contexto de las disciplinas plásticas, contando con figuras de notable trascendencia histórica. En esta selección vemos un lenguaje puesto al día, cuyo carácter experimental indica un modelo que siguen las jóvenes generaciones, en lo que respecta a las técnicas expresivas. El grabado en la Argentina, posee una fuerte tradición, y estos artistas pertenecen a ella.
El Museo del Grabado, ha decidido jugar un rol preponderante como institución activa, en la participación y representación de la gráfica argentina en eventos internacionales.
Alicia Candlani, Cristián Delhez, Eduardo Iglesias Brickles, Mirta Kuppferminc, y Fablán Velasco, representan el saber y el espíritu de las generaciones precedentes, como un sello identificatorio de una escuela de las generaciones precedentes, como un sello identificatorio de una escuela de grabado en la Argentina. Este lenguaje se universaliza a través de las particularidades de nuestra cultura en sus más genuinas tradiciones y rupturas epistemológicas. Este fenómeno nos hace ver juntos, tradición y vanguardia, modernidad y postmodernidad, que en latinoamérica se presenta a través de ciertas apropiaciones. El «folk» urbano y rural, y el regionalismo, están explicitados en estos envíos, a través de un mestizaje cultural.
Argentina, en Sudamérica, intenta conservar y acrecentar los lazos con los países que emigraron hacia nuestro continente. Somos una cosmópolis, al decir de Borges. Reconocemos nuestro mestizaje cultural, y es a partir de esta identificación, que intentamos crear nuestra fisonomía. Esta Bienal de Ljubljana, es ya un acontecimiento conocido y respetado en nuestro contexto artístico. En ella ponemos lo mejor de nuestras intenciones.