Gabriela Alonso
“Creo que la educación hoy día no está planteada desde un lugar de paz, todavía se sigue generando la competencia”
Entrevista de ADRIANA GASPAR
Generación Abierta: Contanos cómo fue tu origen en el arte, antes de ser una artista más performática.
Gabriela Alonso: Yo vengo de la pintura y del grabado, el origen está dado de cuando era muy pequeña, era muy traviesa, desde muy chica me mandaron a talleres de arte. Siempre del entorno familiar, la única relación que tengo con el arte son las personas que me crié, que son mis abuelas, mis tías abuelas, es con el bordado. Extrañamente era una persona ciega la que más bordaba, y con la que más conexión tuve yo con esa cuestión de la manualidad. Y después de más grande empecé en la Escuela de Bellas Artes, previo a eso hice talleres con diversos artistas.
Cuando estudié Bellas Artes, hice pintura y mas tarde estudié grabado. Arranqué como pintora, y grabadora, más pintora. En los ’90 con diferentes cuestiones que tienen que ver con la política, militaba en el movimiento humanista, y empecé a participar de eventos y de cuestiones que estaban bien ligados a la política como marchas, y ahí encontré un montón de formatos, de hacer intervenciones urbanas con el arte como medio.
G. A.: ¿Ese fue el encuentro con el arte de acción?
G.Al.: Claro, yo no lo había planeado de ese modo digamos, no, yo, ya había empezando a hacer fotografía; en el 2000 estaba haciendo fotografía a pleno, y fotografía urbana, todo muy ligado a hechos políticos, los ‘90 para mí fueron como una clave para poner el cuerpo en acción. Dejar de entenderme como una pintora, o como alguien que se dedica al arte encerrada en un taller y la producción empieza a aparecer en la calle, y bueno la fotografía de hecho, tengo todo documentado y una cámara desaparecida en el 2001 con el derrocamiento de De La Rua y demás, y bueno, eso digamos fue donde yo después entiendo al inicio del 2000 que voy por el camino del arte-acción, la intervención urbana, el soporte en la calle, hice video porque es algo más práctico y acompaña un poco más la demanda de las necesidades de expresión etc.
G.A.: ¿Cómo te definís hoy?
G.Al.: Yo creo que soy una artista vocacional, y me parece que lo que más hago es un poco la performa, pero en realidad también hago mucha fotografía, hago mucho pre procesos a las performance, hago dibujos, hago maquetas, grandes cosas, hago algunos ensayos en cuanto al dibujo, al color, a la forma, al manejo espacial, me interesa mucho la instalación, las performas mías siempre tienen que ver con instalaciones, y con obras sobre todo salidas de la educación, y ligadas a otros y otras que no son artistas visuales, me gusta mucho trabajar colectivamente, en la actualidad y hace rato lo vengo haciendo. Me gusta mucho trabajar obras que son continuadas en el tiempo, o sea que se larga una idea, y se avanza en la obra colectivamente y se propone la obra desde diversos formatos, desde los blogs en Internet o las páginas para que todo el mundo pueda visitar, el libro de artista, instalaciones.
G.A.: ¿Formatos no convencionales?
G.Al.: Si, no pintura, no grabado.
Hace ya rato, antes del 2000, que tengo como instancia corporal la necesidad de encontrarme con la pintura, y de vez en cuando lo hago, pinto, pero no muestro la producción de pintura porque es muy caótica, son como gestos violentos de esa necesidad aún que tiene el cuerpo de encontrarse con esa materia prima que es el acrílico, yo pinto con pintura de pared.
G.A.: ¿Abordás alguna temática en referencia al arte de acción?
G.Al.: A mi la vida me va llevando por las instancias temáticas, si tengo que definirme dentro de algún tema quizás por ser mujer… sea el de cuestiones femeninas, que tienen que ver con el género, pero en realidad no, me puedo definir si o puede interesarme la cuestión esta de trabajar con otros y el colectivo es lo que realmente me hace sentir bien en las convicciones de un otro.
G.A.: Vos hablaste del arte correo, del libro de artista, que son distintos, muy interesantes pero que de pronto no es tan común verlos en la actualidad, ¿Por qué pensás qué es?
G.Al.: Una de las causas es esta que te acabo de decir , los propios artistas se educan en arte, se educa al artista, para que se encierren en un taller a producir, no digo que esté bien o esté mal, pero los artistas se desentienden de las otras prácticas, e inclusive menosprecian las otras prácticas, entendiéndolas como prácticas menores, no, cuando yo te digo que genero obras donde se pierde la identidad del artista, por ejemplo Manos en el Repasador y Relatos de Recetas y Redes; Redes fue una obra que la pensamos Jorge Restrejo, un artista colombiano y yo, que tiene que ver con la construcción de redes, y ahí trabajé con la Secretaria de Desarrollo Social, Minoridad, Género, Cultura, Educación, entonces se construyeron redes que ya no coordinaba ni siquiera yo, sino que coordinaban otros como ser maestros, docentes, amas de casa, médicos, sectores, gente que coordina clubes barriales, geriátricos, entonces se cruzaban en esa construcción, de ese tejido de redes -donde además se juntaban hilos, trapos, elementos varios que tenían que ver a veces con el medio ambiente, otras no-, se juntaban por ejemplo alumnos de una escuela de jardín con abuelos de un geriátrico a construir redes, ya entonces Jorge y yo perdemos identidad y la obra cobra identidad, en la construcción con otras personas que no son artistas, que no se dedican al arte. Para mí el arte es eso, para mí, el arte cobra significado acá, no me interesa el arte en otra instancia, me encanta ver pintura, me encanta ver grabado, me encanta ver fotografía, lo practico, que se yo, pero no me interesa que yo genere ese tipo de actividad.
G.A.: ¿Pensás que las instituciones artísticas desde el IUNA para abajo o paralelas no colaboran con este discurso artístico?
G.Al.: Algunos docentes sí, la institución no. Algunos docentes hacen grandes esfuerzos, yo conozco muchos, inclusive docentes que en museología llevan el arte correo, y otras prácticas, porque el arte correo también es algo que uno lo tiene que coleccionar, yo ahora le doné a Graciela Gutiérrez Maxs todo mi acerbo de arte correo de diversas convocatorias que fui haciendo a lo largo de mi vida, para no tener esa carga, ella acaba de escribir un libro de arte correo.
Yo tengo artistas históricos dentro del arte correo, en mi colección, entre comillas, no. Entonces digo, yo conozco personas, artistas, personas que se dedican al área de la teoría que defienden estas prácticas, inclusive mas allá de las carreras artísticas, pero la institución si bien da ciertos permisos- porque a mi nadie me dijo nunca que no le hable a los alumnos del arte correo-, no promueve esta práctica, yo creo que la educación hoy día no está planteada desde un lugar de paz, todavía se sigue generando la competencia, el comercio, digo, no está mal vender la obra de arte, pero sí es como que todos van para un mismo lado.
G.A.: ¿Vos en cuanto a artista performática qué limites te ponés? ¿Cuáles son tus límites?
G.Al.: La lastimadura
G.A.: ¿Llegás a la lastimadura?
G.Al.: No, no, ese es mi límite, una vez sola, una vez por error, y otra vez por calcular mal, y otra vez que justamente la propuesta era trabajar con el agotamiento físico en una obra que se llamó Saltar la soga– era una pregunta, saltar la soga es un juego de niñas o un macabro entrenamiento camuflado, esa era la pregunta, hablaba un poco de estas cuestiones que nos preparan a las mujeres para ciertas cosas, saltar la soga hasta perder el conocimiento-, ahí verdaderamente llegué a ese estado y me costó mucho la recuperación después, pero lo tenía que hacer, ese es el límite. El límite siempre es no exponer el cuerpo a cuestiones que te puedan lastimar.
G.A.: Vos en tus acciones siempre trabajás con el cuerpo, ponés el cuerpo como cuerpo presente, ¿trabajás con el cuerpo ausente también?
G.Al.: Trabajo con la ausencia también, con el objeto, trabajo en procesos de ausencia, actualmente estoy trabajando en un proyecto que trata de eso, estoy trabajando con ropa de personas, también he trabajado con almohadas de personas, he coleccionado durante un año almohadas, como sueños suspendidos, digamos está la presencia de la persona ahí pero no está la persona y estaba el nombre de la persona abajo. Estaba la almohada de mis abuelos que murieron hace 20 años.
G.A.: Si tuvieras que elegir alguna performa que hiciste a lo largo de todos estos años, ¿Cuál elegirías?
G.Al.: Y creo que la primera que se llamó “Agua del Río de la Plata”, que tenía que ver justamente con los desaparecidos en las aguas del Río de la Plata. Y después hay otra performa, una que hice en Chile que trabajé con un minero, en esa performa trabajé con la ausencia del cuerpo, de los mineros, trabajé adentro de una mina, en una situación donde en una de las puertas donde morían muchas personas-eran muchos niños los que morían-, los chicos eran los que llegaban a ese lugar, eran los que abrían y cerraban las puertas y a veces en ese abrir y cerrar las puertas estaban en una zona de riesgo absoluto, y los chicos empezaban a trabajar ahí a los 7, 8 años, menuditos y llegaban a esas instancias en la mina, trabajaban de madrugada, largas horas, abriendo y cerrando las puertas, traté con un minero que había perdido a su hermano y a su padre, entre las minas, y eso para mí fue como muy fuerte. Pero sí estas dos performas son las que me han marcado.
G.A.: ¿ Hay algo que me quieras contar, algún proyecto que tengas para este año?
G.Al.: Proyecto para este año… estoy trabajando en esto de la ropa de personas, en libro de artista, estoy trabajando en una desde hace dos años, que se llama relatos de receta y que tiene que ver con la recopilación de la historia a través de una receta de cocina, es un proyecto que está subido a un blog, esa obra se va construyendo a medida que van participando personas, mujeres, hombres, relatando una historia, su propia historia, por qué esa receta, quien se la dio, en qué momento de su vida, por qué la realiza; una manera de recuperar su propia historia, se hace la comida y se escribe la receta, entonces eso va avanzando y todas las recetas van terminando. La documentación se hace en video-relato, y después toda la construcción de la comida se hace fotográficamente, y bueno ese es el proyecto que tengo sin terminar, que no se cuando va a terminar. Lo lindo que tiene, es que como está subido a un blog, cualquiera lo puede ver, y bueno a medida que va creciendo voy sacando los libritos, cada receta tiene un librito. Ese es el proyecto para este año.